Repsol se alía con Suma Capital, la gestora líder en inversiones ESG e impacto en España, para crear el fondo SC Net Zero Tech Ventures, con el objetivo de invertir en empresas que desarrollan tecnologías prometedoras en materia de descarbonización y economía circular con la ambición de acelerar su aplicación a escala industrial.
Repsol aportará 50 millones de euros a este fondo, que dará entrada a nuevos inversores hasta completar un montante objetivo de 150 millones de euros. El fondo tendrá unos claros objetivos de sostenibilidad y permitirá potenciar la doble transición, digital y verde, en el importante reto de la lucha contra el cambio climático, donde las nuevas tecnologías tendrán un papel clave.
Por otro lado, Repsol Corporate Venturing, el vehículo de la multienergética para invertir en startups tecnológicas y que se creó en 2016, finaliza ahora una etapa y en la nueva, pasa a denominarse Repsol Deep Tech. Será de propiedad exclusiva de la compañía, estará gestionado por ésta, y contará con 50 millones de euros para realizar inversiones en startups que desarrollan tecnologías para la descarbonización, pero que aún se encuentran en fases iniciales de desarrollo.
A través de estos dos nuevos fondos, complementarios entre sí, Repsol crea un nuevo modelo propio de innovación abierta y colaboración con el ecosistema emprendedor. El objetivo es diversificar su estrategia de inversión capital-riesgo y combinar sus capacidades internas en innovación y desarrollo propio de tecnología, con la participación en startups tecnológicas. Los objetivos estratégicos de estos fondos apoyan la meta de la compañía de alcanzar las cero emisiones netas en 2050, detectando nuevas oportunidades y tecnologías que contribuirán a la consecución de sus objetivos de descarbonización.
SC Net Zero Tech Ventures Fund
La actividad del fondo SC Net Zero Tech Ventures se centrará en ámbitos como la movilidad baja en carbono; la descarbonización de la industria y la economía circular; las energías renovables; y las soluciones energéticas digitales. El fondo tendrá un alcance internacional, orientado principalmente a Europa y Norteamérica.
La gestión del fondo recaerá en un equipo independiente que combina una larga trayectoria en inversiones ESG de Suma Capital, con la experiencia en inversiones de venture capital y el sólido conocimiento en tecnologías para la transición energética de Repsol. Este equipo gestor contará además con el respaldo de un comité tecnológico formado por científicos de Repsol y expertos independientes.
Suma Capital gestiona hoy varios fondos de capital privado, en dos estrategias complementarias de inversión en pymes de alto crecimiento (“Growth Capital” y “Sustainable Infra”). Con cerca de 700 millones de euros bajo su gestión, Suma Capital se ha consolidado en los últimos años como un líder europeo en la inversión sostenible en el segmento de empresas y proyectos de pequeño y mediano tamaño.
De esta manera, Repsol y Suma Capital se alían para abarcar mayores oportunidades en la transición energética y en la lucha contra el cambio climático.
Repsol Deep Tech Fund, la evolución de Repsol Corporate Venturing
El fondo corporativo de capital riesgo Repsol Corporate Venturing nació hace ocho años. A lo largo de su vida ha acelerado los modelos de negocio de más de 30 startups en las que ha invertido.
Además de aportar asesoramiento técnico desde el Repsol Technology Lab, donde cuenta con más de 230 científicos, el conocimiento de la industria y la red de innovación de Repsol, las startups tienen la oportunidad de probar tecnologías y su modelo de negocio en activos reales de la compañía multienergética como banco de pruebas.
En esta nueva fase, Repsol Corporate Venturing se focalizará −ahora como Repsol Deep Tech− en startups con tecnologías en sus fases iniciales de desarrollo, pero con un alto potencial en la transición energética. Tendrá una nueva dotación de 50 millones de euros y presencia internacional con foco principalmente en Europa y Estados Unidos. Ya forman parte de este fondo dos participadas: Sunrgyze y Perseo Biotechnology. La primera es la spin off que Repsol y Enagás han creado para escalar la fotoelectrocatálisis, nueva tecnología de producción de hidrógeno renovable que ambas compañías están desarrollando. Por su parte, Perseo Biotechnology, en la que Repsol participa con un 25%, centra su actividad en la valorización de la fracción orgánica de residuos sólidos urbanos para convertirlos en bioetanol, un producto de alto valor añadido que puede utilizarse como combustible renovable.