El presidente del directorio de Petroperú afirmó que la operación del lote 64, “representa una oportunidad para que Petroperú retorne al negocio del upstream”. “Estamos hablando de un descubrimiento en el que se ha desarrollado una inversión muy importante para identificar el yacimiento. Este lote es clave para el futuro del Oleoducto y para las operaciones de Petroperú, por ello se viene evaluando la forma más eficiente para su operación a través de su asociación con un inversionista privado”, aseveró.
Eduardo Guevara Dodds, quien participará en el encuentro académico PERÚ ENERGÍA 2020 (a realizarse este 18 y 19 de octubre en su versión virtual y con la presencia de importantes ejecutivos del sector), visionó sinergias muy importantes entre los lotes 64 y 192, puesto a que ambos emplearán el mismo conducto para transportar el crudo para su posterior procesamiento en la nueva Refinería de Talara. “Podría ser que las empresas que están participando por la adjudicación del lote 192 también puedan tener interés en licitar por el lote 64”, comentó.
Respecto a ambos lotes, precisó que aún está pendiente formalizar la salida de Geopark del lote 64, así como terminar el plazo del contrato con Frontera Energy para la explotación del lote 192, posiblemente en el primer trimestre del 2021. “Solo nos falta definir el socio y el porcentaje de participación”, señaló.
Modernización de Refinería Talara
En otro momento, el funcionario sostuvo que Petroperú no usará los fondos del erario nacional para continuar el financiamiento del proyecto de modernización de la Refinería Talara, cuyo objetivo es maximizar el potencial productivo a 95 mil barriles de petróleo por día.
“En el caso del financiamiento, faltan unos US$ 1,000 millones, de los cuales ya tenemos 285 millones aprobados por el Gobierno español y ahora estamos en el proceso de implementación de la inversión. Nos falta un último tramo de 700 millones por cerrar, pero no estamos recurriendo al Tesoro Público”, acotó.
Respecto al estreno operativo de la repotenciada Refinería de Talara, anticipó que las unidades de producción deberían empezar a funcionar a partir de noviembre del 2021, aunque las unidades auxiliares – tales como la planta de tratamiento y extracción de agua de mar, y las plantas de hidrógeno y ácidos sulfúricos – entrarían en función desde el primer trimestre de ese mismo año.
Oleoducto con pérdidas
Muy aparte, Guevara Dodds alertó que la paralización de las operaciones en el Oleoducto Norperuano – que hasta febrero transportaba 40 mil barriles diarios – ha generado pérdidas cuantiosas para Petroperú. “Al mes, estamos perdiendo aproximadamente US$ 6 millones por no transportar el crudo de los distintos lotes”.
En tal sentido, resumió que la imposibilidad de tener operaciones continuas, debido a los reclamos sociales, impactan en la producción petrolera a transportar, lo que dificulta establecer tarifas que permitan incentivar una mayor producción.
No obstante, refirió que Petroperú se encuentra trabajando en un “banco de crudos que permitirá mezclar los crudos de cada lote y obtener un blending con una calidad determinada para transportarlo”. Aseguró que dicho proyecto aportará mayor eficiencia en la operación del Oleoducto, en el almacenamiento de crudo en las estaciones 1 y 5, y en la reducción de costos operativos.