Durante su participación en Perú Energía Digital 2020, Irene Cañas, presidenta ejecutiva del Grupo ICE, destacó que la matriz energética de Costa Rica posee una capacidad instalada compuesta en su totalidad por fuentes renovables, teniendo como protagonistas a las centrales hidroeléctricas (65.90%), eólicas (11.45%), geotérmicas (7.30%), biomasa de bagazo (1.98%) y solar (0.15%).
«En el año 2019 logramos una producción eléctrica de 99.15% con base en fuentes renovables durante los 312 días del año. Tuvimos también en operación más de 214 mil medidores inteligentes y 2,373 kilómetros de líneas de transmisión», resaltó.
Menciono también que, debido a los 8 meses de lluvia y 4 meses de sequedad, en Costa Rica existe un alto número de plantas hidroeléctricas, las cuales se complementan con la generación de la biomasa a partir del bagazo de caña. En tanto que las plantas solares representan un porcentaje muy pequeño, aunque su presencia ha ido aumentando progresivamente.
«Mayo es el mes en que mayores desafíos tenemos, ya que no disponemos de suficiente agua y en ocasiones se nos acaba la zafra de caña. Así que recurrimos temporalmente a un búnker de energías no renovables para la continuidad de la generación eléctrica. Este búnker tiene un respaldo muy grande de no renovables, pero su uso es mínimo durante el año», comentó.
Irene Cañas puso en contexto que la gran transformación de la matriz energética de Costa Rica empezó durante la década de 1990, cuando se incorporó primero a la generación térmica, para luego complementarla con las fuentes hidroeléctricas, geotérmicas, eólicas y de biomasa. «En los últimos años, hemos sacado de la matriz a las plantas térmicas ineficientes».
Electromovilidad
Respecto al avance de la electromovilidad, resaltó la presencia de 1192 vehículos eléctricos en Costa Rica, además de la instalación de una extensa red de infraestructura de carga eléctrica pública y privada, para la cual se ha invertido US$ 3,000 millones y se espera construir otros 30 cargadores rápidos para este año.
«Nuestro país cuenta con un plan nacional de descarbonización para el transporte personal, público y de carga, además de un plan de transporte eléctrico para el desarrollo de infraestructura de carga y una estrategia 4.0 de Grupo ICE para contribuir con la política del Gobierno en materia de electromovilidad», indicó.
Comentó, por último, que Costa Rica cuenta con una política de incentivos económicos para agilizar la incorporación de autos eléctricos, así como la exención de restricción de circulación vehicular para estos.