La energía solar será una pieza clave en el futuro y Francia ya está estudiando una brillante idea que arrancará en Marsella y pasa por cubrir las autopistas con unas enormes cubiertas solares. Disponen de 3.000 horas de sol al año y una radiación de 1.900 kWh/m², así que se están planteando cubrir una serie de autopistas urbanas con grandes techos solares que podrían producir energía para nada menos que 60.000 personas, el 7% de su población.
Marsella se ha dado cuenta, aunque un poco tarde, de que su ciudad tiene un enorme potencial para producir energía solar. Es lo que ocurre en prácticamente toda España. Así que allí se están planteando cubrir sus autopistas –las que son urbanas- con una gigantesca cubierta llena, en su superficie, de paneles solares para producir energía para la ciudad. Están desarrollando la idea de una cubierta fotovoltaica que cubra 26 kilómetros de recorrido.
Según los cálculos que han hecho hasta el momento, teniendo en cuenta las horas de radiación anuales, podrían alcanzar una producción de 130 GWh al año; es decir, la energía que necesita para su consumo un total de 60.000 personas, que es nada más y nada menos que el 7% de su población. Esto es, únicamente, con una superficie de 800.000 m² y una potencia máxima de 100 MW.
El coste de esta instalación sería realmente grande, porque ya tienen estimado que rondará los 300 euros/m² y, por lo tanto, podría implicar el desembolso de 240 millones de euros. Este gasto supone más del doble que las grandes centrales fotovoltaicas desplegadas en tierra, pero es equivalente al de las instalaciones en tejado con un rendimiento excelente. Pero, sobre todo, en lo que están pensando es en que habrá precios más bajos para la electricidad garantizados durante un plazo no inferior a 20 años. Por eso, consideran que es un gasto que merecerá la pena a largo plazo.
Además, este no es el único plan que tienen entre manos para el despliegue de paneles solares por toda la ciudad. También está previsto que se desplieguen más instalaciones de este tipo en tramos aéreos del metro, en aparcamientos o en líneas ferroviarias situadas cerca del barrio. Si solo cubriendo las autopistas urbanas ya pueden conseguir toda la energía que necesita un 7% de su población, ‘techar’ con paneles solares más partes de la ciudad podría suponer un cambio significativo para la gestión energética de la ciudad.
En España, como comentábamos anteriormente, estamos en uno de los países europeos con mayor potencial para la energía solar. Sin embargo, por el momento los despliegues más significativos que se están haciendo son a nivel particular. También es cierto, y es relevante para este proyecto que se va a llevar a cabo en la ciudad francesa, que hay que considerar el almacenamiento de energía. ¿Por qué? Porque la energía solar se puede aprovechar durante las horas del día, pero hacen falta baterías estacionarias que permitan usar esta energía también durante la noche.
Las cifras teóricas son muy interesantes y sí, se puede cubrir buena parte del consumo eléctrico diario con fuentes de obtención de energía solar. Sin embargo, durante los próximos años deberían empezar a llegar al mercado grandes baterías estacionarias que permitan su aprovechamiento también por la noche, o en días menos soleados. Y entonces sí será cuando este tipo de proyectos resulten verdaderamente interesantes y productivos. Sea como fuere, cuando lleguen ese tipo de baterías ciudades como Marsella podrían estar ya perfectamente preparadas.