Brasil está experimentando un exceso de proyectos eólicos, señaló la presidenta de la asociación Abeeólica, Elbia Gannoum, en la conferencia Brazil Wind Power.
“Hemos construido una base regulatoria tan buena que tenemos muchos inversionistas e iniciativas en nuestra cartera para invertir, pero no contamos con suficiente mercado para la cantidad de proyectos que ya tenemos”, señaló. Sin embargo, existen soluciones a este problema, según la dirigente.
En el corto plazo, una forma de seguir expandiendo el segmento es atender industrias que quieran contratar fuentes de energía renovable como parte de la transición energética.
A medio plazo, en los próximos tres a cinco años, existe la posibilidad de producir y exportar amoníaco verde e hidrógeno verde, además de permitir el desarrollo de otras tecnologías como la eólica costa afuera.
“Estamos construyendo la base regulatoria y comercial para la energía eólica marina, que enfrentará el desafío del mercado con el segmento terrestre. Con esto, además de atender a nuestra matriz, podremos hacerlo a la matriz energética mundial”, indicó Gannoum.
La capacidad nacional de energía eólica actualmente es de 24GW, de los cuales 22,5GW se encuentran en funcionamiento comercial y 1,5GW en fase de pruebas y cuya puesta en marcha está prevista para las próximas semanas.
Según el regulador de energía eléctrica, Aneel, Brasil tiene 454 emprendimientos de energía eólica terrestre en construcción o en etapa de desarrollo, con una capacidad total de 16,6GW.
Mientras tanto, el regulador ambiental Ibama evalúa alrededor de 170GW de proyectos eólicos marinos, la mayoría de ellos en aguas someras frente a las costas noreste, sureste y sur.