“He tenido la fortuna de trabajar en muchos países de Sudamérica y sin duda cuando hablamos de generación distribuida con gas, en mi top número 1 está Perú. Por su cantidad de gas y por su infraestructura, creemos que la generación distribuida con gas natural en Perú tiene un potencial altísimo y se va a ir desarrollando casi 70 MW. Nuestro objetivo es llegar a 100 MW en el 2025”, así lo destacó el gerente regional de comercialización de Jenbacher, Álvaro Fonseca, en PERÚ ENERGÍA Norte.
En el marco de la presentación “Generación distribuida con gas: ¿cuánto cuesta y qué beneficios reporta el uso de esta tecnología”, explicó que la tecnología de Jenbacher opera exclusivamente con combustibles gaseosos, como el gas natural, gas licuado de petróleo y biogás, para posteriormente transformarlos en energía eléctrica. Las máquinas empleadas para tales fines oscilan desde los 300 KW hasta 4.5 MW para el mercado de 60 Hz, con eficiencias de entre 37% a 44%.
La empresa cuenta con una base instalada de generación distribuida de 16 unidades a gas natural en los sectores comercial e industrial (52 MW), 3 unidades a gas natural en el sector eléctrico (10 MW), 3 unidades a biogás en el sector del aceite de palma (3.6 MW) y 1 unidad a biogás en el sector de tratamiento de aguas residuales (0.6 MW).
“Los proveedores de equipos de generación distribuida tienen la responsabilidad de educar al cliente final. Un centro comercial estará más preocupado en arrendar establecimientos o un hotel en atraer más huéspedes. Pero aquellos clientes que sepan cómo hacer la valoración de proyectos de energía distribuida, estarán en capacidad de desarrollarlos. Y aquellos que no, sus proyectos no progresarán”, afirmó.
De acuerdo con Álvaro Fonseca, los costos de la electricidad producida por el portafolio de soluciones de generación distribuida de Jenbacher son considerablemente bajos, habiendo registrado costos de entre 6 a 10 centavos de dólar por kilovatio hora.
Jenbacher, agregó, “se siente competente para participar en proyectos de generación distribuida de decenas o centenas de megavatios” con unidades de producción de menor tamaño y bajo costo de inversión en comparación con las máquinas tradicionales. Precisamente, en Perú participan en una central térmica de 10 MW para apoyo a la red de distribución local, y en Brasil participan en una central térmica de 150 MW para brindar carga base en beneficio de una ciudad remota en la selva amazónica.
La empresa también está presente en el mercado de la autogeneración, con máquinas de generación distribuida que brindan fuente de energía, ahorros y confiabilidad para plantas de fabricación de plásticos, textiles y botellas. No obstante, subrayó que la maduración de un proyecto de autogeneración o cogeneración “toma años” y para fomentar este tipo de proyectos es necesario establecer incentivos que premien la eficiencia energética.
Los equipos de generación distribuida de Jenbacher también operan con biogás e hidrógeno, el costo de inversión en ambos es alto. Por ejemplo, en el caso del biogás, el capex se incrementa por la necesidad de transformar la biomasa en biogás. En el caso del hidrógeno, el capex podría llegar a ser el doble del capex con gas natural, sumado a ello el alto costo de la producción, almacenamiento y transporte del hidrógeno.