La Central Térmica Malacas, la principal planta de energía eléctrica del norte del país, de la empresa eléctrica Enel Generación Piura, podría cerrar sus operaciones a causa de un fallo dictado por el Juzgado Civil de Talara, que ordenó la transferencia (a la empresa Gastalsa) del ducto de gas natural que la abastece de este hidrocarburo y que le pertenece desde 1996.
«Esto ocurre porque se incluyó nuestra infraestructura en un litigio por la masificación del gas entre esa empresa y el Estado peruano, sin considerar que, en el año 2016, el Ministerio de Energía y Minas reconoció que ese ducto era de uso propio de la central Malacas», dijo Enel.
Malacas es una central térmica ubicada en el distrito de Pariñas, provincia de Talara (Piura), con una potencia instalada de 340 MW. Cuenta con tres turbogeneradoras duales a gas natural (TG4, TG5 y TG6), que operan en ciclo simple.
En febrero de este año, el juez José Efraín Carrasco Villegas dispuso mediante una medida cautelar la transferencia forzosa del gasoducto de Enel Generación Piura aplicando una norma del año 2008. Sin embargo, la empresa tiene la propiedad de dicho gasoducto desde 1996, cuando este fue adquirido del Estado peruano. La sentencia aplicada por el juez Carrasco supone la aplicación retroactiva de una norma, lo que no es posible bajo la ley peruana. Mañana 8 de julio, la Sala Civil de Sullana revisará el caso en audiencia pública. Según Enel, el fallo previo no consideró que son propietarios de la central térmica.
