Este domingo 15 de enero se cumplió un año del desastre ecológico más grande que ha afectado al mar peruano, a causa del derrame de más 11.000 barriles de petróleo. Sin embargo, lejos de hacer efectivas las sanciones contra la responsable, la Refinería La Pampilla S.A.A. de Repsol se ha liberado de una millonaria multa, de acuerdo al diario La República.
En julio de 2022, el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (OEFA) le impuso la primera multa a Repsol por 1.087 UIT, que equivalen S/5 millones 004.491, ya que encontró responsabilidad administrativa de su parte por no identificar las zonas afectadas por el derrame de petróleo en el mar de Ventanilla.
En respuesta, la empresa apeló la sanción, cuestión que quedó a cargo del Tribunal de Fiscalización Ambiental, también de la OEFA. De acuerdo a la Resolución N.º 003-2023-OEFA/TFA-SE, el ente declaró nula la Resolución Directoral N.º 1017-2022- OEFA/DFAI, a través de la cual se sancionó a la firma al haberse “vulnerado el principio del debido procedimiento y el deber de motivación”. Además, se señaló que corresponde retrotraer el procedimiento administrativo sancionador “hasta el momento en el que el vicio se produjo”.
Con relación a la vulneración del principio de debido procedimiento, la empresa sostuvo que OEFA no cumplió con remitir dos informes de supervisión. “Si es que ha habido un error o negligencia de parte de la Dirección de Fiscalización [de OEFA] habría que ver cuál fue el argumento de la Dirección en la resolución de primera instancia”, señalan fuentes consultadas por este medio. Se debe tener en cuenta que OEFA maneja un sistema electrónico donde queda registro del ingreso de cada documento, por lo que verificar si estos informes no se entregaron oportunamente no es una tarea compleja.
De esta manera, los afectados, entre los que se encuentran miles de familias, cientos de animales, 2 áreas naturales protegidas y más de 20 playas, perdieron su primera batalla.