El Perú tiene el potencial de realizar producción de hidrocarburos no convencionales en la zona del noroeste peruano, y es importante aprovechar su mejor conocimiento y producción para así reactivar a la industria del petróleo, destacó el director ejecutivo de la empresa Sapience Now LLC, José Sierra.
En el marco del webinar “Potencial No Convencional en el Noroeste Peruano”, Sierra señaló que para la realización de este tipo de proyectos es necesario la participación de todas, o por lo menos de la mayoría de las empresas operadoras, a fin de lograr una efectiva adquisición de las tecnologías y capitalizar la experiencia local en producción de pozos no convencionales, reducir costos y aprovechar mejor los servicios y materiales.
Por su parte, Ysabel Calderón, ejecutiva de la gerencia de promoción y contratación de Perupetro, detalló que los Recursos No Convencionales es un término utilizado en petróleo y gas natural producido por medios que no cumplen os requisitos para producción convencional. “En la actualidad, el término se utiliza en referencia a recursos de petróleo y gas cuya porosidad, permeabilidad, mecanismo de trampa de fluido y otras características difieren de las arenas convencionales y los carbonatos”, afirmó. Entre los recursos no convencionales refieren al shale gas, shale oil, tight sand, entre otros.
En Perú -agregó- se tiene información sobre los recursos no convencionales. De estos se encuentran el oil shale o tight sand, que están en la región del Noroeste (costa norte peruana), los cuales por su accesibilidad han tenido un mayor énfasis de los estudios técnicos. En la región del noroeste destacan la formación Muerto, en las cuencas Talara y Lancones, por tener información geoquímica tales como el contenido de materia orgánica total, entre otros análisis.
Características y formaciones
En la región Noroeste se encuentra petróleo ligero, medio y pesado y se tiene registrado unos 15,000 pozos, a profundidades de 1000 a 7500 pies, que en algunos casos vienen produciendo desde hace 140 años. Entre las características, presentan una producción promedio de 8 barriles de petróleo al día por pozo, y se registran entre dos a cuatro fracturas pequeñas por pozo. Por lo general, las actuales perforaciones se realizan de manera vertical o de manera inclinada.
Una posibilidad de obtener recursos no convencionales en estas zonas sería mediante la perforación horizontal de más de 2,000 pies de longitud y, a través de equipos y dispositivos especializados, se logra “navegar” por las fracturas transversales generadas en los reservorios considerados de muy baja permeabilidad.
Sierra precisó que para la explotación de hidrocarburos no convencionales en el Noroeste se deben realizar trabajos pilotos de perforaciones iniciales; y la ejecución de otros puntos de perforación para hacer un reconocimiento de la formación. Posteriormente se desarrollan las perforaciones laterales, con el cual se pueden registrar las fracturas transversales. De realizarse estos trabajos, es posible perforar hasta 24 pozos en doce meses.
Precisó que formaciones como Muerto, Redondo, Pananga, Ostrea y Mogollón pueden cumplir las características de contener recursos no convencionales. No obstante, es necesario contar con tecnología especializada. Como este tipo de yacimientos se extiende en varios lotes petroleros, es importante contar con la sinergia de las compañías que explotan en estos yacimientos, a fin de aprovechar al máximo estos equipos de explotación y producción, lo que permitirá reducir costos.
Experiencias previas
José Sierra subrayó de experiencias previas en las Américas, con trabajos en Estados Unidos, Argentina y México, donde los resultados en recursos no convencionales han sido positivos. El área más representativa es en el sur de Estados Unidos, en los estados de Texas, Nuevo México, Dakota del Sur y Oklahoma, con producción hasta 8 millones de barriles al día.
En el caso de Argentina, la formación más representativa es la de Vaca Muerta, yacimiento con gas y petróleo no convencional que viene operando desde 2013. Mientras que, en México, se registraron buenos resultados en la formación Chicontepec, que sería un caso análogo de recursos no convencionales similares a los lotes en el Noroeste peruano.