Petrobras y Equinor vienen evaluando un total de siete proyectos de energía eólica en Brasil. Los parques eólicos, que juntos podrán generar 14,5 gigavatios de energía y superar la capacidad de la hidroeléctrica de Itaipú (14 gigavatios), serían instalados en los estados de Río Grande do Sul, Río de Janeiro, Espírito Santo, Piauí, Río Grande do Norte y Ceará.
La carta de intenciones “amplía la cooperación de ambas empresas” para evaluar “la viabilidad técnico-económica y ambiental” de los siete proyectos, según Petrobras.
“Es acuerdo abrirá los caminos para una nueva frontera de energía limpia y renovable en Brasil”, señaló en el comunicado Jean Paul Prates, presidente de Petrobras, quien destacó el “potencial eólico offshore (en alta mar)” del gigante sudamericano.
Desde 2018, Petrobras y Equinor trabajan conjuntamente en proyectos y ya tienen estudios adelantados para los parques eólicos de Aracatu I e II, en el litoral de los estados de Río de Janeiro y Espírito Santo, a los que sumarían los otros cinco anunciados este lunes.
Se trata de los proyectos de Mangara (Piauí), Ibitucatu (Ceará), Colibrí (Rio Grande do Norte) y Atobá e Ibituassu, ambos en Río Grande do Sul), todos con una vigencia para ser implementados hasta 2028.
Sin embargo, Prates indicó que la fase del estudio de factibilidad deberá ser autorizada por los organismos competentes. La iniciativa forma parte del proceso de “transición energética” que busca reducir la emisión operacional de los gases con efecto invernadero hasta 2050.