Perú es el octavo país latinoamericano con mejor equilibrio en seguridad, equidad y sostenibilidad energética. Sin embargo, todavía existen brechas en la equidad o acceso a la energía. Ello se refleja en que el 46% de la población usa combustible contaminante para cocinar y el 71% tiene una o más necesidades energéticas insatisfechas. Para revertir este escenario de pobreza energética, se necesita poner en valor los recursos con los que cuenta el país, como son el petróleo y el gas, cuya abundancia y calidad está comprobada.
Durante su participación en PERÚ ENERGÍA Norte, el gerente técnico de Olympic Perú, Jorge Galloso, resaltó que una de las estrategias para poner en valor ambos recursos, más allá del desarrollo de nuevas zonas, es optimizar los campos maduros, es decir, aquellos yacimientos existentes cuya producción se prolongó por décadas, se encuentran en un declive franco desde su pico inicial y la mayor parte de sus reservas han sido extraídas.
“El 99% de los campos en el norte del Perú también son maduros y su optimización permite la reducción de emisiones”, dijo como parte de su presentación “Rejuvenecimiento de los campos maduros del norte del Perú y su impacto en la reducción de la pobreza energética”. Sin embargo, revigorizar estos depósitos de hidrocarburos requiere tecnologías avanzadas para maximizar la recuperación y suelen presentar desafíos operativos y económicos.
Señaló que existe “infraestructura construida, pozos perforados y facilidades de producción”, pero lo que se necesita es básicamente optimización. Entre las técnicas de optimización, resaltan la perforación Slim Hole, que reduce los costos en 30% y los tiempos de perforación en 20%; los perfiles de saturación, que tiene un costo aceptable y permite la detección de petróleo bypasseado, o el control geológico con IA, que facilita el control en tiempo real las 24 horas y mayor rapidez en la toma de decisiones.
“En Talara, en los siguientes diez años, se perforarán al menos 1,400 pozos de desarrollo, 6 pozos exploratorios y se ejecutarán al menos 330 workover con una inversión total de alrededor de 1,100 millones de dólares, desarrollando 68 millones de barriles de petróleo y 54 billones de pies cúbicos de gas. Esto es un volumen interesante para lo que ha ocurrido en la última década en Talara con una ralentización grande de la actividad”, refirió.
Para la puesta en valor de los campos maduros, complementó el representante de Olympic Perú, se necesitará promover contratos colectivos de servicios, generar un hub logístico para agrupar necesidades en bienes y servicios, crear un hub de innovación en el noroeste para resolver problemas comunes y abaratar el acceso a la tecnología, y proyectos de recuperación mejorada para abaratar el costo del agua para inyección.