El Ministerio del Ambiente (Minam) prioriza las acciones de remediación ante los recientes derrames de petróleo, ocasionados, cerca a las comunidades de Cuninico y Urarinas en Loreto, a través de los equipos especializados competentes como el Organismo de Evaluación y Fiscalización Ambiental (Oefa) y el Servicio Nacional de Areas Naturales Protegidas por el Estado (Sernanp), para asegurar la contención del derrame y supervisar los trabajos que viene efectuando Petroperú.
En ese sentido- luego de realizada la Declaratoria de Emergencia Ambiental (DEA) en el área geográfica impactada- se instaló ayer la Comisión Multisectorial que se encargará de implementar el Plan de Acción de corto y mediano plazo a fin de asegurar la provisión de agua para consumo humano y garantizar la atención sanitaria en lo inmediato y de manera estructurada en la zona.
Dicha comisión está integrada por 16 instituciones públicas, que reportarán sus actividades a través de una plataforma digital que se implementará para agilizar estas acciones.
Supervisiones Ambientales
A través del OEFA se inició -desde notificada tragedia ambiental- la supervisión inmediata para determinar las causas del derrame de petróleo, las responsabilidades de los hechos y el impacto generado.
El equipo técnico del OEFA ha evaluado la calidad de los componentes ambientales afectados en aproximadamente 150 kilómetros de cauce de las quebradas y el rio Marañón por donde recorrió el derrame. Se ha evidenciado la afectación de aproximadamente 188 400 m2 de cuerpo de agua en el canal de flotación y quebradas y 22 kilómetros en el margen izquierdo del río Marañón.
Inspección en Pacaya Samiria
Los equipos especializados del Sernanp de la Reserva Nacional Pacaya Samiria, han verificado en campo la afectación del derrame en la zona de amortiguamiento de dicha reserva. Es así que los guardaparques asignados recorrieron aproximadamente 50 kilómetros, un tramo comprendido entre las comunidades San José de Saramuro y Cuninico, constatando que no existe la presencia de hidrocarburos dentro del área natural protegida.
De esta forma, desde el Gobierno, se promueve e impulsa el fortalecimiento de los espacios de diálogo transparente y responsable para buscar consensos hacia la solución de esta compleja problemática, desde un enfoque participativo e intercultural, trabajando en una agenda común donde la prioridad sea el bienestar de la población y el irrenunciable derecho humano de vivir en un ambiente sano y saludable.