Especialistas analizaron la situación y perspectivas del gas natural en el Perú

La Asociación Peruana de Profesionales de Hidrocarburos y Energía (APHE) realizó su tercer Fórum denominado “Gas Natural en el Perú: Realidad y Expectativas”, el jueves 3 noviembre de 2022, en las instalaciones de la empresa UNNA Energía.


El fórum se inició con la exposición del “Análisis de la situación de la industria del Gas Natural, Reservas y Perspectivas” presentada por el Ing. William Navarro Cornejo (Especialista es análisis de reservas Oil & Gas), seguido por el Ing. Federico Seminario que expuso la conferencia “Potencial exploratorio por Gas Natural en el Perú”; a continuación el Ing. Eleodoro Mayorga Alba presento la conferencia “Gas Natural: Retos para su desarrollo” y finalmente el Ing. Ricardo Bisso expuso la conferencia “Industrialización del Gas Natural, retos y propuestas de su uso en Petroquímica – Seguridad Alimentaria”.


Además, el evento contó con los comentarios de destacados panelistas: Ing. Álvaro Ríos Roca (Director de Gas Energy Latín América / Ex ministro de Energía de Bolivia), Ing. Gustavo Navarro Valdivia (ex Director DGH y ex Director de Perupetro) y del Ing. Erick García Portugal (ex Director DGH).


Entre las principales conclusiones de conferencistas y panelistas, figura que las cifras de reservas probadas de Gas Natural (GN) muestran que vienen siendo consumidas año a año, sin que se revierta esta tendencia, a pesar de las evidencias de mayores y significativos recursos de GN disponibles en el Perú, tanto en la Costa (offshore en particular), como en la Selva Central y Sur. Este consumo de reservas, sin reposición de las mismas, se debe a la falta de políticas del Estado para promover inversiones en exploración, generar las condiciones sociales necesarias y acelerar los procesos de permisos para ejecutar estas inversiones.


Asimismo, es posible disponer de inmediato de reservas adicionales de GN si PERUPETRO actualiza el “Factor de Eficiencia Volumétrica de Reservorios” en los lotes de Camisea y, por tanto, aumentar la disponibilidad de GN y de Líquidos de GN y con ello, reducir las importaciones de GLP.


Dado que la reinyección de GN en los yacimientos de Camisea, es cada vez más costosa e improductiva; se requiere lograr inversiones en proyectos anclas adicionales para el desarrollo del mercado de GN es beneficioso para toda la cadena de valor y para el país en general.


Por otro lado, el precio de GN para el mercado local, establecido en el contrato del Lote 88, es una ventaja competitiva para la economía peruana y debería ser considerada como tal para transformar estas reservas de GN en productos de mayor valor agregado; por ejemplo, en petroquímica que provea urea y explosivos a toda la costa del Pacifico, y asegure la independencia del mercado local de estos insumos clave para la agricultura y la minería.


Una alternativa para la actual crisis de fertilizantes sería que las actuales reservas y recursos contingentes de GN, pueden asegurar el suministro de materia prima para una Planta de Urea de escala mundial ubicada en la Costa Sur del Perú, la cual podría operar a bajos costos unitarios y alcanzar competitivamente la mayor parte del mercado en la costa del Pacifico; así como, la generación de energía limpia con ciclos combinados y la masificación del GN para el sur del país, haciendo viable de manera inmediata la ejecución del gasoducto del Sistema Integrado de Transporte de Gas (SIT Gas).


En ese sentido, el reinicio del proyecto SIT Gas, permitirá inmediatamente reclasificar las reservas contingentes de GN de la Selva Sur y Central a reservas probadas, para poner este recurso en valor.

Adicionalmente, con la ejecución de este proyecto se activaría el interés por la exploración por GN al sur del país, que podría cubrir la potencial demanda de GN en nuestro país y en toda la región.


Finalmente, la reactivación de la actividad productiva y exploratoria del GN es parte de la seguridad energética del país, que es la base para un desarrollo económico sustentable, que resulte en el bienestar de la población, al alcanzar la seguridad alimentaria con la producción de fertilizantes. La seguridad energética y la seguridad alimentaria están fuertemente vinculadas con estas decisiones que deben tomar las autoridades de manera prioritaria y urgente.

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