Perupetro S.A., la empresa estatal encargada de negociar los contratos de proyectos petroleros, informó que Compañía Española de Petróleos (Cepsa) renunció a operar el lote 200 por la falta de avances en el proceso de consulta previa con los pueblos indígenas de Ucayali. «El contratista interesado […] manifestó su decisión de no continuar con los trámites de aprobación del [contrato de licencia]», afirmó Perupetro en una comunicación dirigida a la Federación de Comunidades Nativas de Ucayali (Feconau).
Perupetro afirma que la empresa se va «debido a que el proceso de Consulta Previa, a cargo de la Oficina General de Gestión Social del MINEM (Ministerio de Energía y Minas), no contaba con avances significativos». En consecuencia, añade la agencia promotora de la inversión en hidrocarburos, «la empresa solicitante perdió el interés en suscribir el contrato […], dejando sin efecto la continuación del proceso de Consulta Previa».
El lote 200 está ubicado entre las regiones de Ucayali y Huánuco, en medio de la Amazonía peruana. El 1 de agosto de 2017, la filial peruana de Cepsa —Cepsa Peruana S.A.C.— inició los trámites para obtener una licencia de exploración y explotación de hidrocarburos. Como resultado de ello, 11 comunidades —de los pueblos shipibo-konibo, awajún y asháninka— fueron invitadas a participar en el proceso de consulta previa del proyecto. Desde el principio, la posición unánime de las comunidades indígenas fue la de rechazar cualquier actividad petrolera sobre sus territorios.
La presidenta de Feconau, Graciela Reátegui Mori, comentó: «Estamos muy contentos con este éxito, es el resultado de una lucha librada en común. Hemos creado un frente unido formado por las federaciones Feconau, ORAU, Coshicox y Aidesep, que han apoyado a los líderes de las comunidades afectadas por el proceso a lo largo del difícil camino y durante sus luchas. Ahora es importante informar a los habitantes de las comunidades del importante éxito conseguido, porque son sus derechos».