Este año se verá un gran esfuerzo por aprovechar el vapor, especialmente en una región que experimenta los efectos del cambio climático, según datos del analista de mercado BNAmericas, citados por el diario Caribbeann News Now.
Guadalupe alberga la primera central geotérmica, Bouillante, que produce a escala industrial 15 Mega Watts (MW), lo cual representa el cinco por ciento de la electricidad del área, destacó el texto.
Siguen su ejemplo varias islas cercanas, con la ayuda de grandes organizaciones financieras de este tipo de rubro, como San Cristóbal y Nieves, a cuyo proyecto el Banco de Desarrollo del Caribe le asignó 17 millones de dólares estadounidenses.
El Banco Mundial, por su parte, anunció su colaboración en noviembre último con la Oficina de Asuntos Exteriores, Commonwealth y Desarrollo del Reino Unido, el Fondo para el Clima y los Bosques y la Energía Limpia de Canadá y el Fondo de Inversión en el Clima para estudiar la viabilidad de la geotermia en Santa Lucía.
En Dominica, su empresa de desarrollo dedicada a esta producción avanza en un proyecto de siete MW que, destacan reportes, progresa más rápido de lo previsto, «con la contratación en marcha para llevar a cabo la evaluación social y medioambiental de las líneas de transmisión y las subestaciones».
Las autoridades nacionales confían en que «la puesta en marcha de esta instalación supondrá un alivio significativo no sólo en la generación de energía limpia y verde, sino que se sumará a los esfuerzos por mejorar los niveles socioeconómicos del país», reveló BNAmerica.
Encabezan la capacidad actual geotérmica en Centroamérica, Costa Rica (263 MW), El Salvador (178 MW), Nicaragua (153 MW), Guatemala (34 MW) y Honduras (30 MW)», apuntó el reciente informe.
La energía geotérmica es una energía renovable que se utiliza desde hace miles de años en algunos territorios para cocinar y calentar, se trata simplemente de aquella derivada del calor interno de la Tierra.
Está contenida en la roca y los fluidos bajo la corteza terrestre, se puede encontrar tanto en el suelo poco profundo como en varios kilómetros por debajo de la superficie, e incluso más abajo hasta la piedra fundida extremadamente caliente llamada magma.
Este tipo de energía es la gran desconocida entre el grupo de las renovables, por lo que muchas veces es ignorada, aunque ya existía y se conocía desde la antigüedad, remarcó un texto hace algunos años.