La compañía minera Antamina, ubicada en el top 10 de productoras de cobre a nivel mundial, puso en marcha su proyecto destinado a extender la vida útil de su operación en la región Áncash hasta 2036, con una inversión de más de US$ 2,000 millones. No obstante, la expectativa es que el plazo pueda ser mayor.
El proyecto inició luego de que la empresa obtuviera, en febrero del 2024, la aprobación de la modificación de su Estudio de Impacto Ambiental (MEIA) para esa iniciativa, tras casi cuatro años de presentada al Gobierno peruano.
Fabiola Sifuentes, vicepresidenta de Medio Ambiente de la empresa, sostuvo que el proyecto busca la optimización de los componentes mineros ya existentes dentro de su actual área de operaciones (en el distrito de San Marcos), entre ellos su complejo polimetálico de tajo abierto, botaderos y presa de relaves, y que la inversión la están realizando por etapas.
Antamina es una mina de cobre, zinc, molibdeno, plata y plomo, operada bajo el modelo de joint venture por las empresas BHP (con el 33.75%), Glencore (también con el 33.75%), Teck (con el 22.5%), y Mitsubishi (con el 10%), cuyas operaciones y producción comercial iniciaron en el año 2001.
Retroceso en la producción
Según los últimos reportes del Ministerio de Energía y Minas (Minem), de enero a junio del 2025 Antamina produjo un total acumulado de 166,512 toneladas métricas finas (TMF) de cobre, volumen 26% inferior respecto a igual periodo del 2024, y que la retrocedió al cuarto lugar entre los principales productores locales del metal rojo (con un 12.5% de participación).
Cabe recordar que, entre 2023 y 2024, la empresa ya había retrocedido al segundo lugar entre los principales cupríferas (con 435 mil a 434 mil TMF anuales en cada año) luego que alcanzara el primer lugar el año 2022, donde aportaba casi el 20% a la producción nacional del metal rojo, al ser superada por la mayor producción de otras grandes compañías.
Según indicaron representantes de Antamina en diálogo con los medios, este proyecto busca mantener los niveles de producción de la empresa.
Fabiola Sifuentes explicó que, tras la aprobación del MEIA en el 2024, la empresa ya tiene una operación encaminada, por lo que venía procesando sus licencias y permisos sectoriales para el proyecto, los cuales se han ido obteniendo en forma progresiva, de modo que la iniciativa ya está en construcción.
Posibles operaciones a futuro
No obstante, Claudia Cooper, vicepresidenta de Sostenibilidad de Antamina, criticó el plazo que tomó la aprobación del MEIA por parte del Gobierno. “El MEIA demoró cuatro años, son cuatro años en que dejas de invertir y producir, y cada vez se nos hace más complicado mantenernos en el tiempo”, afirmó.
En tanto, según la empresa, aunque el proyecto planea extender la vida útil de la mina hasta el año 2036, ya están realizando estudios que les permitan seguir operando aún por más tiempo. “Antamina no tiene planes de cerrar (operaciones) ni en lo inmediato ni en el mediano plazo”, sentenció Sifuentes.
Cooper también refirió que aún enfrentan retos para poder concretar diversos proyectos pendientes en el ámbito social en el área de influencia de sus operaciones, y que realizan bajo el esquema de Obras por Impuestos (OxI).