Particulares y negocios en Alemania recibirán subsidios para suavizar el golpe de los precios más altos del gas natural y la electricidad a partir de enero, dos meses antes de lo previsto en un principio, según dijeron las autoridades el martes.
La iniciativa forma parte de un paquete de ayudas por valor de 300.000 millones de euros (dólares) que prepara el gobierno alemán para abordar la crisis energética provocada por la guerra de Rusia en Ucrania.
Los precios del gas para consumidores y negocios pequeños o medianos se limitará a 12 céntimos de euro por kilovatio y la electricidad a 40 céntimos de euro para el 80% de su consumo del año anterior. El 20% restante no se subvencionará, para instar a los consumidores a ahorrar energía.
La industria y las empresas con altas necesidades energéticas verán sus precios limitados a 7 céntimos de euro por kilovatio hora para el 70% de su consumo de 2022 y la electricidad a 13 céntimos de euro. Para recibir la ayuda, las compañías no podrán pagar dividendos mientras reciban el subsidio.
Adelantar la medida dos meses costará a las arcas públicas unos 4.500 millones de euros adicionales, indicó el Ministerio de Economía. Los críticos habían advertido que iniciar el mecanismo en marzo podría haber supuesto penurias a muchos durante los meses del invierno. El gobierno ya había dicho tres semanas antes que pensaba adelantar la medida a febrero.
Como medida de corto plazo, los consumidores y pequeños negocios no tendrán que pagar sus facturas de gas y calefacción de diciembre.