Enel Piura se queda sin gas natural suficiente para energizar al norte peruano

El sector eléctrico en Piura enfrenta una grave crisis debido a la escasez de gas natural, recurso esencial para la generación de electricidad. Esta situación ha provocado al menos dos apagones en la región y en Tumbes durante el 2023, afectando principalmente a la Central Térmica Malacas, la mayor generadora de energía del norte peruano.

Luis Chiok, gerente general de Enel Generación Piura, explicó, a Diario El Comercio, que la planta ha reducido su capacidad de generación de electricidad en los últimos dos años, pasando de un 40% a solo un 15% de su capacidad. Este deterioro se debe principalmente a la falta de gas natural, que ha caído de 30 millones de pies cúbicos diarios (MMPCD) a solo 11 MMPCD en la actualidad. Como resultado, la central ahora produce apenas 50 MW, muy por debajo de los 130-140 MW que generaba hasta el 2023.

El origen de esta crisis radica en el aumento de la demanda de gas natural por la modernización de la refinería de Talara, que desde 2023 consume hasta 25 MMPCD, mucho más de los 5 MMPCD antes de la actualización. El gas que antes abastecía a Enel ahora es utilizado por Petroperú, que controla los lotes I, VI y Z-69. Desde octubre de 2023, estos lotes fueron transferidos temporalmente a Petroperú, lo que ha exacerbado la falta de gas disponible para la central térmica.

Enel ha intentado compensar esta falta contratando gas de otros proveedores como UNNA Energía y OIG, que operan los lotes VI y X. Sin embargo, el volumen suministrado sigue siendo insuficiente para mantener la planta en funcionamiento. Además, las licitaciones para retornar los lotes I y VI al sector privado están estancadas debido a trámites burocráticos y la falta de postores.

Una opción adicional que contempla Enel es obtener gas del lote XIII (Olympic), ubicado en Sechura, el mayor campo gasífero del norte del país. No obstante, el alto costo de transporte a través del ducto de Promigas hace inviable esta alternativa para la empresa. Aunque Promigas aclara que las tarifas de distribución son fijadas por Osinergmin, el precio sigue siendo un obstáculo para el abastecimiento de gas a las generadoras eléctricas de Piura.

Esta falta de suministro y el encarecimiento del gas han provocado que la Central Malacas pierda competitividad en el despacho de energía del Comité de Operación Económica de Sistema Eléctrico (COES), cayendo de los primeros lugares al quinto o sexto puesto. Chiok destacó que esta situación afecta la seguridad energética de todo el norte del país, ya que Malacas representa el 22% de la capacidad instalada eléctrica de la región. En caso de una falla en el sistema de transmisión, como podría ocurrir en ciudades clave como Trujillo, Chiclayo o Chimbote, todo el norte del país podría quedar aislado.

El gerente de Enel ha solicitado al Gobierno, Osinergmin, el Minem, Petroperú y Perupetro la adopción de medidas urgentes, tales como la reducción de las tarifas de distribución de gas en el norte para igualarlas con las de Lima, y la aceleración de la adjudicación de los lotes de gas a operadores privados. Además, advirtió que, si la Central Malacas queda fuera del sistema, los usuarios de la tarifa domiciliaria e industrial enfrentarían un aumento en sus costos de aproximadamente 60 millones de dólares anuales, debido a la necesidad de recurrir al diésel, un combustible mucho más caro.